El complejo es muy grande y chicos y chicas que trabajan allí están muy bien organizados. Son muy majos y amables.
Todo muy limpio y puntuales.
Hicimos con ellos el descenso del Sella y la ruta a caballo.
Los caballos sanos y muy bien cuidados y tratados.
De volver a Asturias, las actividades las haría con ellos de nuevo.